Inicio › Foros › Hackear la Pandemia › Telar Narrativo – 23 de Mayo 2020

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  • 23 mayo 2020 a las 12:00 #713
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    #HackearLaPandemia 07

    A partir del texto Estrategias Narrativas en tiempos del COVID-19, iniciamos un espacio virtual para discutir y cuestionar el discurso hegemónico de la Pandemia y encontrar antídotos narrativos para responder a las necesidades de nuestras comunidades. La semana pasada nos preguntamos: los límites del Estado Nación y tejer autonomías como alternativa.
    El sábado 16 de Mayo a las 11h CDT (11h Ciudad de México, 10h Guatemala, 13h Buenos Aires, 18h Berlin) será la 6ta. sesión con el tema: «Estrategias de resistencia en el territorio del hogar«. Convocamos a quienes quieran sumarse a la compartencia y traer por escrito (o el formato de su preferencia) una reflexión sobre el tema.
    El futuro es un territorio a defender
    Agenda de hoy:
        
    Práctica Narrativa (1hr)
    Invitación a eventos (15 min)
    Actualización de proyectos (15 min)
    Lectura de la práctica narrativa (10 min)
    // Minuta: 
        
        Queremos recordarles que la intención de crear estos espacios es abrir la imagin-acción a otros mundos posibles. #HackeoCultural es una colectiva situada en Abya Yala, trabaja con organizaciones y movimientos sociales que luchan por defender la vida.
        
        Andrea explica la intención de este espacio.
        
    «Este es un espacio abierto, pero los espacios abiertos también tiene normas de convivencia»
        
        Andrea, Totonicapán. No he sido respetuosa de las señales que mi cuerpo me ha dado. Hablamos mucho de la defensa del territorio, prácticas que están incrustadas en nuestro cotidiano. La platanción de palma aceitera, monocultivos. El proceso mío de sanar mi cuerpo y sanar la tierra, ha sido una conversación individual y colectiva. Con mi familia, hemos re-evaluado lo que debemos consumir. 
        
        Eve, medio feminista Luchadoras. Trabaja el video, la edición, el collage. Las acciones que se han potenciado a partir del confinamiento es que agradezco el haber podido parar un poco. La chamba de activistas es muy pesada. Esta noción del autocuidado es muy difícil llevarla a la práctica. He aprendo a valorar mucho la oportunidad de estar en casa, cocinar. A veces lo que menos que tengo es tiempo para hacer las compras, el mercadito del barrio, disfrutar ese ritual que se ha visto minado. Las alternativas han sido compas que ellos mismos cultivan. No la he pasado mal, me da más miedo regresar a la normalidad y al ritmo de caballo desbocado. Ha sido útil para escuchar lo que me está pidiendo el cuerpo. Cocinar es como hacer collage, esa narrativa de que no sé cocinar la he dejado poco a poco.
        
        Frida, espacio autogestivo de siembra en Xochimilco. Este espacio ha retomado mucho más fuerza con la pandemia. Las reflexiones que tengo son desde ahí. La reflexión individual, han habido momentos de mucha ansiedad, nos ha hecho entrar en crisis, en la salud, pero las otras crisis que ya estaban ahí. Nos hacen estar más concientes de buscar las otras herramientas que ya estaban ahí, el alimento también es la medicina. Estos espacios de siembra empiezan a ser esos espacios para la reflexión, para juntarnos. Nosotres decidimos no parar porque la vida del huerto depende de nuestra chamba. Ojalá lloviera más, pero no es así. Reflexionamos sobre estas cosas y seguimos dándole a la siembra. Sanarnos con las plantas que hay ahí. Un espacio colectivo de resistencia aquí al sur de la ciudad. Imaginar cómo podemos entrelazarnos.
        
        Lucía de Buenos Aires. Soy de Italia. Participo hace dos años de una organización barrial en las villas de acá de la ciudad. En relación a mi experiencia con la alimentación, cambió bastante, empecé a colaborar con las ollas populares. Ver las medidas de las alimentaciones, cocinar para 300 personas o cocinar para 1, cuanta importancia empieza a cobrar nuestros platos a la hora de comer. En algunas circunstancias no están garantizados en todos los momentos del día, en todos los días. Esa experiencia en relación a las cantidades. Los días que me he quedado en casa y no al barrio, he comido más lento y un poco menos. Alejarse de la ansiedad, sustituir esa voracidad, ese estilo de alimentarse, con algo más tranquilo, más lento, más agradecido. Sentir que el cuerpo responde mucho mejor, la digestión es más efectiva. Creo que esta situación me ha dado la oportunidad de reflexionar un poco y cambiar mis hábitos. La expericneia personal con las hierbas medicinales, vengo experimentando con ellas, hacer mucho más frecuente la exploración y la experimentación con ellas. Hace unos días me sentí muy mal, un brote de dengue recientemente. Descubrir cuales de todas las hierbas que tenía guardadas, tenían efectos de protección de los vasos capilares.
        
            Paloma, Jalisco (México). Desde hace tiempo que vengo haciendo home office, desde hace tiempo que había dejado la chatarra. Esta pandemia en específico me ha hecho pedir menos comida, cocinar más. Me ha hecho refleixonar particularmente que el tema de la cocina y el tema de la alimentación tiene que ser un tema más comunitario. Creo que en muchos caso y en muchas casas, cocinar se ha vuelto un tema de mujeres. Hay muchos varones a quienes se les ha complicado cocinar. La ciudad y sus tiempos no nos ha permitido darle tiempo a la comida. Lo que he escuchaqdo también es que en esta pandemia mucha gente está reparendiendo a cocinar, que no son tan malso en la cocina. El tema de la alimentaicón tiene que ser colectivo, no se puede quedar sólo en las manos de las mamás, de las abuelas. Más personas tendrían que sumarse tanto en la cocina como en la producción de alimentos.
            
            Wendy e Iván, Guatemala. La experiencia de la alimentación viene de un tiempo antes de la pandemia. Cambié mi alimentación intentando reducir la cantidad de basura que generaba. Era una mejor opción una manzana que una fritura. Empecé a acostumbrarme a llevar un pachón, tomaba más agua, reducía mi consumo de gaseosas. Cambiar el lugar donde comía, me daban cinco desechables. Empecé a buscar lugares donde consumir sin generar desechos. Durante un año cambié mis hábitos y empecé a comer mejor. También me di cuenta que mi salud y mi peso dependía de mi ciclo de sueño, parte de lo que tuve que trabajar. Esto sucedió antes d ela pandemia, me enfermaba menos, me sentía mejor. Durante la pandemia esto vino a amplificarse, darse tiempo de cocinar, estar en casa y prepararnos. Vino a transformar esto, esta cuarentena la estoy viviendo con mi pareja, en estos tiempos es más fácil que ambos nos organicemos, nos dedicamos a preparar algo que nos quite las ganas de comer chatarra. Los ritos de la comida, esta parte comunitaria donde juntos podemos cuidarnos a nosotros mismos, un proceso curativo y sanador. No somos vegetarianos, pero hacia allá vamos, buscar formas más sanas para nosotros pero también para el ecosistema.
            
            Primero que Xochimilco, que pase el contacto de su colectiva. Soy Master, colaboro con el rancho electrónico. Antes estuve colaborando con espacios de educación popular. Sobre lo de la comida, mi ritmo alimenticio ::: El encierro y la depresión, no soy una persona de estar encerrada, subí mucho de peso, empecé a darle más duro al a fritanga. Me preocupa un chingo el tema de mi alimentación, me gustaría poder comer rápido o tener comida para transportar. Cómo balancear eso, cómo sé cuándo comer una u otra cosa. Yo hago deporte, después de un rato de entrena uno ve la gordita, el taco de buche. Trepar todo esto al semillero, cómo alimentarnos mejor, una vez quise hacer una app para saber qué es lo que uno debe comer, cuántas frutas y verduras después de un litro de coca. Yo no soy nutriólogo y no sé cómo hacerlo, pero ojalá alguien que tenga esos conocimientos y los quiera compartir.
            
            Fernando de Guatemala, vivo en Berlín. Mi alimentación como la he tomado, estar tan lejos de uno de los tantos hogares, me viene a la memoria un montón de ingredientes que acá es muy dificil conseguir, acá cuando los consigo los atesoro. He recuperado por ahí recetas que eran de familia, que no me había animado a hacer, ahora en grupo hemos estado cocinando, revalorando. Hablo desde un país que tiene muchos privilegios, pero me parece muy bien lo que está sucediendo en el espacio de hackeo. Ese lento retorno a la cocinada en común, inventar y crear cuando no se consiguen todos los ingeredientes. Es una de las cosas importantítismas que nos deja esta locura. Un cambio en la forma de consumo de alimentos que ya se viene gestando de un tiempo para acá. Organización comunitaria barrial va a ser muy importante, para desmantelar ese sistema de mal nutrición que nos tiene impuesto este sistema económico. 
            
            Sawi. Semidesierto, Ñusaavi en Oaxaca. Soy parte del colectivo pitaya negra. Desde hace seis años venimos trabajando temas de salud, de alimentación. Quiero compartir una experiencia que viene sucediendo desde hace varios meses. La fitoterapia ñuu saavi es una rama de la ciencia que se dedica a investigar las propiedades de lso alimentos. Esta es una de las regiones más pobres de este país, aquí estamos haciendo una difusión del consumo de las frutas que tienen . El mercado auditivo es un proyecto de difusión sobre productos naturales que tienen antivirales naturales. Estamos difundiendo el consumo del pulque y del aguamiel, la pitaya tambiérn tiene selenio y zinc, estas son absolutamente necesarios. Estamos dando el paso a tener la soberanía alimentaria en nuestras comunidades. Estuvimos sembrando antes de la lluvia, nuestra propuesta es un huerto que tenga plantas que tegan. Difusión a través de cápsulas de radio de difusión, pero también el huerto medicinal para que se reproduzca en sus patios, en sus azoteas. Haiga pandemia o no, lo importante es estar sanos. Estas frutas se pueden conseguir donde sea. Es un proyecto muy bonito porque sabemos que en muchas partes. Esta es mi experiencia.
            
            Itsi, estoy en Michoacán pero soy de Jalisco. Me encuentro ahora en el lugar dond^e nací. A mí me han llegado pensamientos y he resonado con algunas cosas que me han llegado por ahí. Pensando en la diversidad de narrativas, hay narrativas veganas, e mi caso desde hace varios años, tengo una alimentación basada en plantas. Una de las preguntas más frecuentes que nos hacen a las personas que no comemos animales, nos preguntan de dónde sacamos las proteínas. Una tabla donde las semillas tienen proteínas, la calabaza es una de las que más tienen proteínas. Producir almendras en sistemas industriales también tienen muchas consecuencias. Me quedé pensando en la triada mesoamericana, la siembra del máiz, frijol, calabaza. Me quedé pensando cuán perfecta es. Las dietas veganas dicen que son caras, pero depende del lugar del mundo donde estés, hay lugares donde no se consume tanta carne. Me quedé maravillada por eso, resoné mucho con una frase que el consumo de plantas no ha traido pandemias como el consumo de animales. Lo comento desde ahí, compartir otras narrativas que también ahí están. 
            
            Lucy, desde la muy seca guadalajara
            mi relación con la comida ha cambiado mucho
            descubriendo otras comidas
            con las luchas del territorio
            
            Allá en atenco me decían que sólo quería la barbacoa de pato
            En la pandemia, me tocó un momento donde estaba cuidando mucho la alimentación
            Cocinar en pareja se siente como un ritmo
            
            Una amiga que tiene contacto con productores locales
            Se está pudriendo la comida
            Se puso a hacer distribución de la comida
            He estado disfrutando muchísimo
            Huertos caseros
            
            Se siente más local
            La posibilidad de alimentarnos
            Así, en colectivo
            La ciudad es una masa de cemento
            Pero no era así, estaba lleno de ríos y bosques
            Espacios comunitarios donde se siembra
            La necesidad de alimentar esta ciudad es muy fuerte
            
            Más pienso en cultivar
            Apoyar procesos que ya existen
            Defender el agua
            
            La cocina y la cocción como estos momentos
            para regresar a la lentitud
            Uno nace en un mundo en crisis
            pero este momento nos da un momento
            
        Julio, Guatemala, vive en Berlín. Colectivo voces y bloque latinoamericano. Trabajo en un proyecto de moneda local, moneda comunitaria. En términos de la comida, yo como muy rápido, sin tiempo de comer. Este cambio de tiempo que trajo la pandemia. Aquí comiendo pupusas me recuerda a mi familia, a mis tías. Aquí en Berlin, el centro del imperio, el neoliberalismo ha precarizado a los granjeros. Un granjero se suicida al día, le venden a las transnacionales, las estructuras mismas acá ya no dan. Esa dependencia que tiene la gente al consumo, reciben estos privilegios y no tienen muchas maneras de pensarlos. Hace falta el ámbito político en el sentido explícito, cómo cambiamos esto, cómo generamos democracias. Economías relacionadas con lo que comememos.
        
        Aldabi, Nezayork, México. Yo al poco tiempo de haber empezado esto, decidí no beber alcohol, no comer azúcares saturadas, pastelitos, panes. Se sufre porque hay fuerte tradición panera. No consumir lácteos, si tengo algún bichillo dejar de alimentarlo. Dejé de comer algunos tipos de carbohidratos. Ando así desde hace dos meses y he notado mucho el cambio radical en el cuerpo. Primero en bajar de peso pero también en cómo me siento, las jaquequas que ya no han regresado, han disminuído los malestares en el estmómago. Cuando dejan de entrar la cocacola y los bimbos a los pueblos, es un efecto desenvenenantes. Comer una tortilla, hacer ejercicio, se ha sentido bien. Las inequidades que son el reparto de los trabajos del hogar, la cocinada. Que todo mundo entre a trabjarle ahí. El consumo de cerveza se ha disparado. Dieta y ejercicio. Hay mucha hambre en la ciudad, ha salido gente a los municipios a pedir ayuda, cómo revertimos el hambre que se está dando. Hay compañeros que están enfermos y están en prisión, compas presos que tienen covid, no los liberan, no les dan amnistía sufriendo el virus, la cárcel no tiene medicamentos. Están teniendo que ver cómo la lidian con una u otra plantita, la situación de estos compañeros, ciertas plantas y conocimientos pueden salvar vidas. Si no comen bien normalmente, menos si les pasan medicinas. Muchos cuerpos colectivos e individuales atravesados por esta experiencia, la forma que consumismos y producimos hacerla común.
        
        Goyo, de Monterrey. Amigo date cuenta, y pueblo bicicletero colectivos. Tengo una alimentación basada en plantas desde hace tres años que me ha servido para replantearme mi relación con mi cuerpo, pero también con la tierra y con los animales. Durante la contingencia esta alimentación y forma de relacionarme me ha apoyado para no tener desbalances en mi cuerpo.También me pasa como a otres que tengo antojos, mi talón de aquiles son las palomitas, sin embargo sí he intentado hacer un esfuerzo por consumir menos aceites, menos comida procesada. El sistema social económico, capitalista, me provoca estar apresurades, siempre tener esta prisa por hacer todo y acabar todo. Esta lentitud que ha traido estar en esta contingencia, tomarme el tiempo, más consciente y desprenderme de esa prisa. Esa parte corporal 
        
        4uk4n – Compas, mi señal es muy mala. hago mi aporte desde el Wallmapu. Las resistencias desde el Sur están vivas.
        
        La tierra, Ñuke Mapu, nos llama, nos invita a escuchar, el silencio es solo aparente, nada es estático, todo se transforma. Que nuestro alimento sea nuestra medicina es menester. Elegir la sabiduría de nuestra madre y lxs abuelxs no es cuestión de derecho o legalidad alguna, es cuestión de dignidad y subsistencia, es parte e nuestra herencia natural y nos llama como un magnetismo que trasciende a la razón. Cuando la mente calla lo mas visceral aflora como el único objetivo real que nos compone y compartimos cin el resto de la vida, nuestra proyección hacia el sol. Quien da la espalda al sol genera su propia sombra sobre si mismx.
        
       Amarela: Lo de la primera pregunta: sal de la cosa chica que trajo la tía pichi que sus compañeros de lucha afrodescendientes le compartieron, miel de comalcalco que produce la tía miri con comunidades tabasqueñas, café de coopcafé que no hace daño porque es orgánico, xarcutería de unos alemanes oriundos de tepepan que tienen su tiendita, hortalizas de los chinamperos de Xochi. Todo junto, con sus esfuerzos para conseguirlos y mezclarlos en medio de mucha chamba de cuidados. Cocinar es imaginar, y el desafío de que lo que imaginan tus pupilas gustativas lo traduzcan como apostaste. Deseo: hacer una colectiva que haga ollas populares porque llegan historias de hambre bien erizas.
        
        
        Lucy: queremos agua limpia, agua sin veneno.
        Sof: «Somos la resistencia en su más mínima expresión» «Cuídame, que yo te cuido». 
        Aldabi: Yo creo que dirían, ocupa que llueva.
        Isa: Dónde van? se han vuelto locos? Paren!
        Frida: nos dirían que sigamos resistiendo, que tengamos las semillas guardadas, esperando esas lluvias de esperanza. 
        Lyn: Diría, más animales caminan con libertad, nos reproducimos en mayores plantas, respiramos mejor, tenemos la oportunidad de fluir de mejor manera.
        Iván:  «Somos el principio y esencia de la vida.»
        Amarela: capaz dirían, Capaz, dirían: Les perdono. A ver si aprenden y atesoran esto en su cabeza , corazón y vida. Salud
        Wendy: «Es tiempo de sanar, aprender a nutrirnos y desintoxicarnos.»
        Fer: «Te olvidaste de cuidarnos….pero te seguiremos nutriendo si nos dejas»
    Dzahuidoo: La soberanía alimentaria y sanitaria está en tus manos….
    Dal: No se dejen envenenar, defiendanme, ser saludables es juntas
    Aldabi: Quiero agregar otra: «no se olviden de los rituales de lluvia en mayo»
    Bere: «Seguimos siendo tu mejor opciòn. Tu fuente de vida»
    Flores: «acá estamos para que sigan aprendiendo, observando y sintiéndonos, somos une misme,»
    Eve: soy tan generosa que no retengo, 
    Goyo: «Vida somos, vida damos y vida queremos»
    Lyn: No queremos estar emparentadas con las semillas trasngénicas.
    Jorge: Que se acabe la soberbia del antropocemtrismo, somos parte del universo
    Alajila: LAS SEMILLAS DIRÍAN: humanos, eligieron bautizarnos, pero se olvidaron que siempre fuimos vuestras madres
    itsi: Yo también soy comunidades, de plantas, de animales, de ciclos, tratándo de estar en equilibrios.
    Eve: Soy tan generosa que no retengo. No desesperes  , detente, siente, observa, aprende. Que la vida toma tiempo. Que el viaje para seguir resistiendo es hacia adentro.
    Lin: Las semillas dirían nos resistimos a estar emparentadas con las semillas transgénicas
    julio: las semillas dirían: salgan del monocultivo, cerotes!
    Eve: Para que la vida se abra camino se requiere de rituales, fiesta y compartancia y agradecimiento
    Fede: somos el pasado y también somos el futuro. Se ha hecho un tiempo para escucharnos, aprovéchenlo.
    // Comentarios adicionales e invitaciones
        
        Invitación a conocer is.gd/coronapedia 
        
        Dzahui Ndoo, [23 May 2020 12:58:24]:
    Envío texto sobre mi participación del día de hoy…
     FITOTERAPIA ÑUU SAVI Y SOBERANIA ALIMENTARIA (COLECTIVO PITAYA NEGRA)                                                                                                      La fitoterapia es el uso de productos de origen vegetal para la prevención, la curación o el alivio de una amplia variedad de síntomas y enfermedades.                                                                                                                                                           La cultura alimentaria se podría definir como la   formación de hábitos alimentarios necesarios para mejorar la calidad de vida y que sirve de base y permite a la población la adopción de actitudes y prácticas alimentarias adecuadas y saludables.
    En México desde la época de la conquista  hasta nuestros días se ha experimentado un constante mestizaje alimentario, conquista alimentaria como tal no la hubo pues desde entonces  contamos  con una  gran diversidad gastronómica .La dieta del México pre cuahutémico era y es una de las más ricas y completas en el mundo, desafortunadamente a partir de esas fechas el mestizaje alimentario, la mercantilización, la elitización de ciertos alimentos, la introducción de cultivos ajenos y la globalización alimentaria han propiciado que olvidemos y en otros casos más graves extingamos algunas especies  que servían como alimento a la población, perdiendo así la soberanía alimentaria, las practicas culinarias y recetas tradicionales de los pueblos originarios,  muchas familias en la actualidad han perdido esa cultura alimentaria pero que paulatinamente y con mucho esfuerzo está en proceso de recuperación . 
    La soberanía alimentaria es el derecho de cada pueblo de definir  sus propias políticas  agropecuarias y en materia de alimentación. La seguridad alimentaria significa que cada persona debe tener la certeza de contar con alimento suficiente y nutritivo.
     En muchas partes de México el derecho a la alimentacion digna  es un gran reto , el servicio a la  salud es precario y en algunos casos nulo , pues no existen condiciones salubres  ni  hospitales en zonas de alta marginación como pasa en  algunos pueblos de la mixteca. Es por eso motivo que los pueblos deben ir rescatando y construyendo   soberanía  alimentaria y en paralelo soberanía sanitaria para asegurar disponibilidad de alimentos y medicinas que son vitales para subsistir.
    En la actualidad los malos hábitos alimenticios, el aumento del consumo de comida chatarra,  el abuso del consumo de antibióticos, fármacos y el consumo de alimentos transgénicos han causado la prevalencia de enfermedades prevenibles como la anemia, deficiencias alimentarias, el aumento de incidencia de enfermedades  como diabetes (infantil y adulta), hipertensión, arteriosclerosis,  enfermedades gastrointestinales, enfermedades renales y cáncer en diversos sectores de la población.  
    México es el 1er lugar a nivel mundial de obesidad y 5to lugar a nivel mundial de prevalencia de casos de diabetes, la falta de una dieta suficiente en niños del sur del país ha originado que 1 de cada 8 niños menores de 5 años presenten algún grado de desnutrición, las cifras reales  de desnutrición materno infantil son inaceptables en el estado de Oaxaca , es precisamente aqui en la mixteca donde se encuentra el municipio mas pobre de mexico Santos Reyes Yukuna.
     El desconocimiento de las propiedades nutrimentales y curativas de alimentos y plantas de la región ha provocado problemas como la falta de soberanía alimentaria y seguridad sanitaria, el día de hoy estas frutas, resinas, cortezas, tallos, hojas, flores, raíces, semillas,  camotes y bebidas aún se encuentran al alcance de todos (as) para el tratamiento y  prevención de enfermedades. Estudios nutrigenómicos han comprobado que existe una comunión genética entre los pueblos y los alimentos que se encuentran en su entorno,  es mucho más saludable comer alimentos de la zona debido a que nos aportan componentes únicos y específicos a nivel genético  que sirven para combatir enfermedades.
    Los mercados tradic
    ionales de la región son un espacio donde uno puede conseguir, truequear o comprar una gran cantidad de productos como alimentos orgánicos regionales, el mercado es un encuentro gastronómico abierto al público, es también  una fuente de conocimiento y salud. 
    Consideramos que los mercados pueden cumplir una función  muy importantes para la revalorización de uso y consumo de frutos, vegetales y alimentos tradicionales, por lo tanto los mercados son un  lugar de divulgación de los saberes alimentarios
    Es por ese motivo que proximamente presentaremos una maqueta de capsulas radiofónicas  denominada MERCADO AUDITIVO: Frutas y Plantas Sagradas del semidesierto Ñuu Savi, en   las cuales registramos los conocimientos de fitoterapia y herbolaria de algunas frutas y especies vegetales usados por nuestros antepasados y curanderos de la región. Con estas  capsulas pretendemos aportar un granito de arena para resolver la problemática de la falta de seguridad alimentaria y seguridad sanitaria en nuestra región.La segunda etapa que esta tambien en proceso de construccion consta del establecimiento de un huerto fruticola medicinal comunitario o “farmacia viviente” en la Colonia del Maestro en Huajuapan  y con esto ofrecer una alternativa inmediata que restablezca la salud y no provoque efectos secundarios,  dicho huerto contendrá algunas de las especies estudiadas y contenidas en las capsulas.
    Consume información saludable.
    Lyn:  Invitar a espacios feministas que ya están trabajando cuerpo, territorio y alimentación
    Jorge: estar preparados para la sanación colectiva. Qué vamos a decirle a las comunidades, cómo vamos a trabajar este duelo, esta situación. Hablar un poco de eso es necesario, es parte de la salud.
    Isa: la dieta mucosa. Están trabajando en proyectos de moneda solidaria.
    Sofía, Voces de Guatemala en Berlín: Me gustaría sumar las prácticas de las redes de rescate de alimentos. En Alemania se está haciendo mucho trabajo de concientización, tanto a nivel de los súpermercados y restaurantes como con ciudadanxs (ej. TooGoodToGo, Foodsharing). También el ayuno como práctica de reconexión y purificación del cuerpo, como un ejercicio para exorcizar la fuerza del consumo capitalista del territorio cuerpo. Me ha ayudado a darme cuenta que necesito menos de lo que pensaba, que el cuerpo agradece el descanso, que menos es más, cuando se come sano y con gratitud. La meditación me ha ayudado a estar atenta a mi cuerpo, mi mente y el presente.
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